Muchas veces hemos escuchado que con la primavera llegan las alergias, e incluso padecer síntomas como estornudos, picazón en la nariz o bien tener los ojos y garganta irritados parecen habituales en esta época del año. Pero ¿qué son precisamente, y por qué se dan mayormente en estos meses?
En general, las alergias son reacciones fisiológicas de nuestro sistema inmunitario hacia algunas sustancias que afectan las vías respiratorias, la piel o el tracto digestivo cada vez que la persona entra en contacto con el alérgeno. Este problema se genera cuando nuestro organismo reacciona ante un estímulo como si fuera una amenaza (virus o bacteria), cuando en realidad la misma resulta inofensiva. De esta manera, desarrolla anticuerpos en pos de vencerla, y provoca ciertos síntomas propios de la alergia.
En estas épocas primaverales resurgen más que nada las alergias respiratorias, es decir aquellas que afectan esta facultad y que se contraen a través del aire que respiramos. Suele contagiarse por los ácaros del polvo, polen, el pelo de los animales o moho, que se generan más en esta época del año. Cuando son inhalados, pueden producir estornudos, picazón en nariz y/o garganta, congestión nasal y secreción nasal acuosa, tos, ojos llorosos y/o rojos, entre otros.
Si bien las alergias pueden afectar a cualquier persona, independientemente de su edad o sexo, generalmente son más comunes en los niños, y los síntomas suelen desarrollarse a lo largo del tiempo.
Cabe destacar que, aunque no existe una cura definitiva para éstas, se pueden prevenir. Lo principal es reducir o eliminar la exposición al polen, polvo y demás alérgenos propios de la primavera, manteniendo las ventanas cerradas y evitando salir en días muy ventosos. La higiene también es clave en estos momentos, por lo que se recomienda lavar las manos y darse una ducha luego de estar en contacto con factores externos. Ventilar los ambientes y limpiar objetos que acumulan polvo es muy importante, tanto como evitar la humedad excesiva en el hogar. Existen medicamentos descongestivos y antihistamínicos que pueden ayudar a aliviar reacciones, para saber si es necesario usarlos, es imprescindible consultar a los profesionales médicos.